Hay una cierta obsesión con la utilización de las nuevas tecnologías, lo que lleva a veces a aplicarlas con ocasión y sin ella. Es decir, no son válidas para todo momento ni contexto y su valor depende también mucho de la utilización que hagamos de ellas.
Un caso específico es el que se produce con el uso de las presentaciones en Power Point. Se abusa mucho de ellas en todos los congresos y en las aulas, y muchas veces no tiene mucho sentido hacerlo. En el caso de la Filosofía (una disciplina basada sobre todo en las palabras) puede ser más complicado, como muestro en la presentación que incluyo en la página de este blog sobre presentaciones.
Pero las presentaciones pueden provocar problemas más serios, como muestra el libro de Franck Frommer en El pensamiento PowerPoint. Ensayo sobre un programa que nos vuelve estúpidos, publicado en España por Península. En un artículo publicado por el periódico Público se muestran los posible inconvenientes. Les dejo el enlace del artículo. Este artículo me ha sido enviado por un alumno del Máster de Educación Secundaria Obligatoria de la UAM, Juan Pedro Pérez Romero
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